viernes, 31 de octubre de 2008

¡No más besos!

La política es una actividad humana necesaria y de la cual nadie puede escapar.
Queramos o no de la política depende nuestra vida. Partiendo del gesto personal del voto quedamos expuestos a ella, los políticos que nos gobiernan o lo que se oponen pasan el día negociando unos con otros para conseguir que su programa no llegue a buen puerto.
Eso es algo para normal, el programa político, algo que debería ser básico se aparta del gobierno y de la oposición y los papeles cambian.Si el partido X, en la oposición, propuso algo en su programa y ahora lo propone el grupo Y en el gobierno, esta claro que la oposición se opondrá y siempre por unas razones que resulta realmente complicadas de entender. Lo que podríamos llamar el "si pero no" o el "no pero si".
Leyes que se emiten sin consenso que son retiradas por el nuevo gobierno, pero que este vuelve a emitir con pocos cambios y los que se emiten son casi peores que los anteriores. Otras leyes muy protestadas mientras estamos en la oposición pero que usamos cuando estamos en el gobierno como si fueran nuestras.
La oposición por la oposición, simplemente por mostrarme diferente al partido de enfrente pero que carece de sentido de punta a punta.

Pero lo peor de todo es que la sociedad no necesita que se les gobierne bien,ni mal, ni siquiera que se les gobierne. Nos adscribimos a un partido como si fuera un equipo de fútbol, y defendemos a ultranza ss decisiones como un penalti injusto a favor. No les pedimos a los políticos de nuesttros partidos que sigan una línea en cierta consonancia con nuesta ideología o nuestro estamento social o nuestra forma de vida. No sabemos lo que queremos o nos convencen de que lo que queremos es algo que en realidad no nos hace falta (la publicidad también ha llegado a la política, evidentemente).

En ocasiones aparentemente lo únioco que queremos es ver que nestros políticos son personas como nosotros, idea que deberíamos tener claro.
Nos empeñamos en ver a nuestros políticos besándose con sus esposas sobre un escenario, después de soltarnios un rollo que no hay quien entienda, por que ni ellos mismos entienden ni creen. Un mitín rodeado de tus forofos que esperan un final feliz, ese beso con la esposa, ese abrazo con sus hijos, esa lágrima de arrepentimiento por haber ligado con la becaria.

¡¡YA ESTA BIEN!!

Lo que queremos o deberíamos querer es que nuestros gobernantes se dedicaran a gobernar, se acordaran de los pobres, de la naturaleza, de mejorar la vida de sus ciudadanos, trabajadores, estudiantes, jubilados, mujeres,...

Desde aquí os pido señores políticos: dejad los besos para vuestra casa, dejad la foto y meteos de lleno en lo que hace falta, mejorar nuestro día a día, el mio y el de todos. No hagais más el ridículo, se os nota que es de mentira.
Y que su marido o su mujer se quede en casa con los niños que tienen que estudiar.

domingo, 26 de octubre de 2008

Para que sirve...

Hace algunos días mientras vigilaba el recreo una de mis nuevas alumnas, se acercó a mi y me hizo una pregunta, habitual en alumnos de 1º de ESO, pero a la vez muy interesante y que a mi personalmente, como profesor me dió mucho para pensar: ¿para que sirven las Sociales?
Lo cierto es que no recuerdo muy bien lo que le respondí de entrada, claro que como buen docente ledi una larga explicación que por encima de dejarle claro lo que ella pretendía, tendía más hacia la intención de aburrirla y hacerla irse cuanto antes, pues esa pregunta simple escondía mucho más de lo que ella pensaba.
De esta forma me fui a casa, atrapado por la gripe, dolor de cabeza, malestar general e incluso un poco de fiebre. Finalmente llegó la noche y con una pastilla en el cuerpo empecé a caer en los brazos de Morfeo, no sin antes conectar la radio y escuchar ciertos debates que me hicieron volver a la pregunta de mi alumna.
De esa forma recordé tantas cosas leídas y tantas reflexiones hechas sobre el fin de las Sociales,que en este caso se refieran a la Geografía y la Historia.
Su función su fin último es hacernos libres.
Conocer, quizá como el resto de las materias pero las sociales tienen algo de reflexión en su interior que nos lleva más allá.
Encontramos en nuestro mundo personas que niegan la historia, niegan los millones de años de antigüedad de la tierra basándose en nada. Los estudios de siglos que han realizado cientos de científicos por demostrar como el mundo evoluciona no valen para nada por que hay individuos que lo niegan basándose en nada.
Hechos demostrados como el Holocausto judio son negados por personas que no han leido un libro en su vida, y lo peor es que hay otras que los creen, simplemente por que no saben, desconocen el mundo que los rodea.
Si Colón no hubiera estado decidido, por la razón que fuera, a llegar a las indias por el oeste, nunca se hubiera demostrado que la tierra era redonda. Si Magallanes no hubiera dado la vida por dar la vuelta al mundo no se hubiera demostrado que se podía. Pero si alguien no lo hubiera escrito y otro alguien lo hubiera leido hoy aún podríamos creer que la Tierra es plana.
¿Para que sirven las Sociales? Para la libertad propia y de los demás, para no ser engañados y llevados a una guerra innecesaria e ilegal (que lo son todas), para poder creer que nuestra sociedad es el resultado de una evolución muy larga donde todos hemos sido protagonistas. Para saber que el mundo que nos rodea es nuestro mundo, el de todos, y no el de unos pocos que mueven los hilos en su propio interés.
La Historia nos debe ayudar a entender entre otras muchas cosas por qué votamos cada cuatro años, por qué los chavales deben ir a la escuela, o por que esperamos colas en un médico que nos atiende cinco minutos, simplemente por que es el resultado de muchos años de luchas por conseguir derechos. Años de conseguir cambios para mejorar la vida de todos los días.

A la mañana siguiente al empezar la clase le algo más a mis alumnos del sentido de las Ciencias Sociales que ellos estudian, no se si les ha quedado claro,al menos creo que me escucharon ... al menos no se escuchaban ronquidos...

Crisis

Crisis, esa es la palabra más nombrada por todos en los últimos días, o semanas e incluso meses, y si rebuscamos por ahí podemos llegar a encontrar algunos que preveían este desplome global de la economía.
Ahora seguro que muchos decía esa frase que sólo aparece a posteriori, "ya lo decía yo", pero esa es una vil mentira, pues esa misma persona no se acordaba de decir nada mientras vivía por encima de sus posibilidades.
Pero la economía tiene muchas caras, a parte de la de cada uno que lo pasa mal, que no llega a final de mes, de esas familias que se ven sin ingresos a fina de mes y con varias bocas que alimentar, incluida la del banco que espera a final de mes el correspondiente pago.
Pero la crisis viene por diferentes direcciones, una es la construcción que afecta a las personas, creo yo, más directamente, intentemos recrear un poco el círculo para entenderlo mejor.
Todo empieza en el momento de la bonanza económica, nuestros sueldos que por lo general eran basura, curiosamente nos dan para poder pagar una hipoteca, si podemos queremos, y queremos mucho. Por esa razón, como mucha gente quiere un piso y no hay tantos, y siguiendo la ley de la oferta y la demanda, los precios suben. Gracias a Dios la coyuntura es buena y los intereses están bajos por lo que las familias pueden seguir pagando unas letras que están marcando límites históricos. Las letras suben y suben, añadimos la situación a nivel mundial que ayuda subiendo el precio del petróleo y en general la vida, por supuesto también las letras y el precio de la vivienda.
Cuando termina este ascenso, en el justo momento que llega al máximo el precio, es decir, cuando las familias ya no pueden pagar unas letras encarecidas por la subida de los tipos de interés, el coste de la vida etcétera.
En este justo instante la rueda comienza a girar al sentido contrario, si se construye menos hace falta menos mano de obra, personas van a la calle. Individuos que tenían letras que ahora no podrán pagar porque simplemente no tienen trabajo. Con esto supongo que te imaginarás como sigue la carrera.
Como termina el círculo de la crisis, es difícil saberlo, normalmente el estado interviene con dinero a los bancos, con obras públicas que dan trabajo a los que están en paro, jubilando a personas que aún pueden ser jóvenes (pero sacando individuos del mercado laboral hay puestos para otros).
Lo peor de la crisis, a parte de lo qeu ya hemos dicho es que todo esto ya pasó una vez, o muchas veces pero las mentes empresariales no quieren darse cuenta, pierden el norte, no miran atrás para ver que es lo qe ocurrió, simplemente creen que eso a ellos no les ocurrirá, pero ocurre y los que se ven más perjudicados, como siempre, son lo que están más abajo. Los que tienen que luchar cada día por salir adelante y conseguir un futuro mejor.

Pero quiero quedarme con lo que dijo hace poco un economista sobre la crisis. Decía que la palabra crisis lo que indica es un momento de cambio, un momento adecuado para replantearnos las maneras de trabajar, de hacer las cosas, en economía en particular, pero qeuizá también en política como ámbito general. Aprovechemos esta crisis para seguir mejorando y después aprovechemos al historia para no olvidar lo que hemos aprendido.

jueves, 9 de octubre de 2008

Ley de playas

Estoy muy ilusionado, por fin se esta haciendo algo en nuestro país siguiendo las leyes con precisión, orden y sentido común. Sí, estoy realmente feliz por que en poco tiempo (relativamente, por supuesto), veré las playas de la costa malagueña limpia de edificios que estropean el paisaje y destruyen la naturaleza.

Esta es la opinión que me ha creado ver el dasalojo que se ha hecho en canarias (Tenerife, si no me equivoco) a unos ciudadanos, de sus casas de toda la vida. Por encima de la vida de unas personas que hace muchos años, a causa de su trabajo (el de la mar que no es precisamente de despacho), tenían que vivir cerca de su puesto de trabajo. Un empleo que en muchos casos no decidieron ellos, si no el proceder de su vida, sus costumbres familiares, etc. y eso les hizo asentar sus familias junto a la playa, un espacio que carecía de valor hace algún tiempo pero que ahora todos miran con ansia de rentabilidad.

Es cierto que desconozco el proceso seguido, la cantidad de avisos, las ayudas prestadas, pero la noticia, finalmente, es el desalojo. Arrancar literalmente a las personas de sus casas, a los ciudadanos de sus recuerdos. Unos domicilios construidos mucho antes de una ley de costas que como otras muchas leyes defiende a aquellos que están en los despachos y tienen una casa junto a la playa que por alguna razón no esta en contra de esa ley, aunque puedan pescar desde su jardín.

Por supuesto la campaña de desacreditación de esas familias ha sido grande, la mayoría tienen una segunda residencia, lo que puede ser verdad o no, o podríamos ver en que condiciones, pero sobre todo con la libertad de poder tenerla, de disfrutar lo que es suyo, por que lo fue antes de que los empresarios y economistas miraran ese rincón del mundo, por que antes no valia nada.

Creo qeu no, que Málaga se queda como está, que los hoteles no se van a ir de la costa aunque incumplan miles de leyes de costas, de higiene, de seguridad o de sentido común. Se pueden dar muchas razones, pero seguro que una, importante es que se construyeron antes de la ley de costas, igual que esos que estos días han sacado en volandas de sus casas.

No me gusta pensarlo, creo en la democracia pero por momentos la ley no parece la misma para todos.